Fernando Alonso se enfrenta a
un fin de mes crucial para su defensa del liderato con dos carreras en dos fines
de semana consecutivos. Tras su fulgurante arranque del mundial, de cómo
finalice esta primera incursión de la F1 en Europa puede depender buena parte de
su triunfo final. El primer reto pasa por Mónaco, un circuito en el que las
equivocaciones cuestan tremendamente caras. Y el líder del mundial lo sabe por
propia experiencia.
El piloto ovetense aseguró
ayer, en un comunicado difundido por su escudería, que "en Montecarlo los
errores están prohibidos", aunque también destacó que pese a tratarse de un
circuito menos exigente para los motores, "el coche tiene su importancia". Para
el ovetense, "pilotar en el Principado siempre es algo especial, sobre todo en
los primeros entrenamientos del jueves, cuando hay que intentar acostumbrarse a
todo. Es un sentimiento extraño", comentó.
La carrera tampoco es una más
dentro del calendario. "Es una carrera especial en la que hay que estar muy
preparado mentalmente. Hay que estar concentrado al cien por cien desde el
jueves hasta el domingo", dijo. El circuito urbano de Montecarlo es, según todos
los entendidos, en el que la manera de pilotar tiene más importancia."Eso dicen,
pero una buena conducción no es sinónimo de victoria. Ya he corrido tres veces
en el gran premio de Mónaco y siempre piloté igual. La primera vez estuve muy
atrás y el último año, con Renault, luché por la victoria. El coche también
tiene su importancia, porque hay que tener suspensiones eficaces y un buen motor
que libere la potencia progresivamente", indicó.
UN COCHE FIABLE
A diferencia del bólido
con el que tuvo que competir el pasado año, "el R-25 es fácil de conducir y muy
previsible, lo que hace al coche ser ideal para este circuito", añadió Alonso
para quien su monoplaza en Montecarlo, con innovaciones aerodinámicas, no será
más lento que el McLaren de Kimi Raikkonen, pese a las buenas prestaciones que
ha dado el coche del ganador del GP de Barcelona y que han dejado bastante
indiferentes al líder del Mundial. "Francamente, no me sorprendió. Sabíamos que
eran un poco más rápidos que nosotros y que sus nuevos reglajes eran muy buenos.
Pero no creo que Barcelona marcara las diferencias reales que hay entre los
coches, porque Kimi (Raikkonen) se fue demasiado rápido en la primera vuelta. En
Mónaco el equilibrio será mayor", explicó el piloto.
Fuente de información:
LaVozdeAsturias