Una pancarta en la que se podía 
leer «Mónica tus fans siempre contigo», numerosos posters de apoyo, varios ramos 
de flores e, incluso, el 'Asturias patria querida' recibieron a la ya ex 
concursante de 'Operación Triunfo' en la vuelta a casa tras su salida de la 
academia. Alrededor de un centenar de personas, entre familiares y seguidores, 
esperaban a la gijonesa a media tarde en el aeropuerto. 
A las 18.30, la megafonía 
anunciaba la llegada del vuelo procedente de Barcelona donde venía Mónica. El 
pasillo de llegadas se convirtió en un auténtico revuelo donde fotos, camisetas 
y bolígrafos fueron los grandes protagonistas. Tras reencontrarse con su padre, 
Luis, y sus tíos en la terminal, Mónica, muy emocionada y con un gran ramo de 
rosas en la mano, fue recibida entre aplausos, gritos de apoyo y el himno de 
Asturias, entonado por el gaitero Óscar Fernández. 
A pesar del cansancio acumulado 
tras más de cuarenta días en la academia, la joven permaneció más de media hora 
entre autógrafos y fotografías. Un tiempo en el que la palabra «gracias» fue la 
más repetida por Mónica, que en ningún momento se desprendió de una gran 
sonrisa. Una felicidad que se incrementó cuando vió a sus abuelos. «¿Ay mi 
niña!», gritaba el abuelo abrazado a ella, mientras su abuela apuntaba: «Está 
preciosa y espero que sea muy feliz porque es una artistaza». 
Su madre, Marce, que estuvo con 
ella en sus últimas horas como 'triunfita', estaba igual de feliz y recordaba 
sus horas en Barcelona: «La academia me pareció más pequeña de lo que sale en la 
tele, pero a ella en la gala la vi con muchísima fuerza». Una fuerza que 
necesitó, una vez fuera de la academia, para firmar a las numerosas personas que 
la esperaron en el hotel en Barcelona. «Estuvo hasta casi las 3 de la mañana 
firmando a todos los que esperaban allí», aseguró Marce. 
Muchos nervios 
Y también en Asturias se 
despachó a gusto. En el aeropuerto estaban Diego, Carlos, Irene, Natalia y 
Pablo, «nerviosos por conocer a Mónica», a la que auguraron «un futuro lleno de 
triunfos». 
Cargados con peluches y 
numerosas cartas, estos jóvenes consideraron «injusta la expulsión porque lo 
hizo muy bien». Una opinión compartida por Enrique y Belén, tíos de Mónica, que 
la vieron en la gala «con muchísima clase, mejor que nunca». Ambos se quejaron 
de «la poca cancha que se le ha dado en los resúmenes» y consideraron que «en 
contra de lo que se quiso vender, Mónica es cariñosa, dulce y extrovertida».
De hecho, la joven no abandonó 
el aeropuerto hasta que no firmó todas las fotografías, pósters y camisetas de 
los que se habían acercado a recibirla. Ésta es su primera visita a Gijón, pero 
su estancia en la ciudad va a ser muy corta, ya que hoy mismo abandonará el 
Principado para cumplir con sus citas en Telecinco.
Fuente de información: 
ElComercioDigital