El Gobierno del Principado y el 
Ayuntamiento de Cangas de Onís reiteraron ayer que el acceso libre a los Lagos 
de Covadonga «es inviable». El director general de Transportes, Julián Bonet, y 
el alcalde cangués, Alfredo García, respondían así a la manifestación del pasado 
domingo convocada por la plataforma Por el Acceso Libre a los Lagos y a la que 
asistieron cientos de personas . 
    La respuesta de ambos 
dirigentes políticos fue tajante: «No hay marcha atrás. Seguiremos regulando el 
tráfico a los Picos en épocas de máxima afluencia porque funciona bien y porque 
nuestra misión es proteger el medio ambiente». 
Tanto el director de 
Transportes como el alcalde del municipio cangués calificaron «de error» la 
postura defendida por la plataforma, que reclama el acceso libre y gratuito a 
este enclave situado en el Parque Nacional de los Picos de Europa, y 
recriminaron a «ciertos hosteleros» que estén «dramatizando la situación y 
ofreciendo una visión alarmista». 
También pusieron en duda los 
intereses de este colectivo de oposición, que suma ya unos 210 miembros. «Las 
personas que están capitaneando este movimiento han tenido responsabilidades 
públicas y empresariales. El afán de protagonismo de esta gente no va a ayudar a 
los intereses de Cangas de Onís», declaró el primer edil. Bonet, incluso, llegó 
a cuestionar la sensibilidad ambiental del portavoz de la plataforma y 
responsable de un zoo, Ernesto Junco, del que aseguró que vivía «a costa de la 
libertad de los animales salvajes». 
Encuestas y seguimiento 
El alcalde reconoció que el 
plan de transporte podría haber afectado «en momentos puntuales» a algún 
hostelero, pero insistió en que las encuestas realizadas tanto por Alsa como por 
el Ayuntamiento «demuestran un alto grado de satisfacción por parte de los 
turistas». Es más, desde el Gobierno regional se está realizando «un seguimiento 
gráfico» de la afluencia de visitantes que están soportando los Lagos de 
Covadonga. 
Asimismo, el responsable de 
Transportes del Ejecutivo regional garantizó ayer que continuarán ajustando los 
detalles de este plan de regulación para «lograr el consenso» de todos los 
afectados y «minimizar» los efectos que pudieran existir en el sector 
empresarial, pero insistió en que el acceso libre siempre será «inconcebible». 
«Vamos a seguir discutiendo y negociando, pero sólo con organizaciones serias 
que quieran defender la conservación del medioambiente», manifestó Bonet, quien 
descartó cualquier posibilidad de diálogo con la plataforma. 
Respecto a las quejas de la 
Iglesia sobre la utilización del aparcamiento gratuito de Covadonga durante todo 
el día por parte de algunos turistas que, de esta forma, eluden pagar el coste 
por estacionar en las áreas habilitadas, el alcalde de Cangas de Onís confirmó 
ayer que se ha dejado de expender billetes en el Real Sitio obligando a los 
visitantes a iniciar su viaje a los Lagos en El Lleráu, La Venta o El Bosque.
En este sentido, Julián Bonet 
propuso la posibilidad de eliminar el tiempo de aparcamiento en Covadonga a 
través de «zonas azules gratuitas» sancionando a los turistas que estén «más de 
una o dos horas» estacionados en el Real Sitio, el tiempo medio que dura la 
visita a Covadonga. «Es algo que podríamos discutir entre todas las partes 
implicadas», sugirió. 
Por su parte, el director del 
parque nacional, Rodrigo Suárez Robledano, evitó entrar a valorar la 
manifestación contra la ordenación del tráfico a los Lagos, pero celebró que, 
desde el punto de vista medioambiental, se haya limitado la emisión de 
contaminantes y se esté desarrollando una visita «cada vez más estructurada».
Fuente de información: 
ElComercioDigital