Una vez más el programa del
tiempo vuelve a batir récords de audiencia entre los profesionales asturianos
del turismo. Sin embargo, en esta ocasión no es para penar las borrascas que
azotan la península sino para confirmar que, tal y como dicen los expertos, nos
espera un verano marcado por unas altas temperaturas. La ola de calor que vive
España beneficia al sector turístico asturiano. En el Principado el sol se
traduce para los visitantes en un clima agradable. Por ese motivo, los
empresarios esperan un gran nivel de ocupación en julio y el lleno total en
agosto. Algunos sectores ya están dentro de estos parámetros, como es el caso de
las Casonas Asturianas, mientras que otros apuran las últimas reservas, como por
ejemplo los socios de la Federación de Turismo Rural (Fastur).
Pero el colectivo que está más
condicionado por la metereología es el de los campings. Así que para ellos, los
primeros días de julio están suponiendo una bendición, con un 15% de clientes
más. Los fines de semana las tasas de ocupación se disparan y el resto de los
días los índices se acercan a los de agosto.
La asociación Hostelería de
Asturias, que es el grupo que aglutina a más subsectores, realiza una valoración
global de lo que esperan para el verano ahora que el sol luce día tras días. "La
ocupación debería ser muy buena. En agosto ya lo damos por descontado, pero el
buen tiempo debería favorecer al mes de julio", señala un portavoz.
OPTIMISMO
El nuevo presidente de la
asociación de Casonas (Arca), Antón Fernández, explica que este colectivo ya
tiene totalmente lleno en agosto y durante los últimos días de julio. El buen
tiempo puede favorecer la llegada de más usuarios hasta entonces. Sus socios
comienzan a cerrar reservas a partir de abril y ahora están completando los
huecos que les quedan libres.
La Federación Asturiana de
Turismo Rural (Fastur) espera el 100% en agosto y el 90% a finales de este mes.
Su presidente, Adriano Berdasco, tiene claro que las predicciones metereológicas
influyen. "Cuando el resto del país arde, Asturias siempre es una buena opción,
así que tenemos que aprovecharlo", explica Berdasco, que ayer mismo recibía
reservas para este fin de semana.
El portavoz de los cámpings,
Ramón Álvarez, también se muestra muy optimista. En las cabañas de madera ya no
queda ni un hueco libre y las parcelas siempre van a depender del sol.
Los turistas demandan más
actividades acuáticas
Las empresas asturianas de
turismo activo también están de enhorabuena. El buen tiempo ha elevado la
demanda de servicios desde hace semanas, cuando lo habitual es que no estén
completos hasta finales de agosto. El presidente de la asociación de turismo
activo y albergues (Ataya), Natxo Alonso, explicó que, gracias a las altas
temperaturas, las especialidades más solicitadas son las acuáticas, mientras que
el resto se mantienen estables. Gracias a este arranque, Ataya cree que el
número de usuarios al final de la campaña sea superior. Alonso indica que la
primera quincena de agosto y los fines de semana están casi al completo.
El empresario y antiguo
presidente de Ataya, Fernando Ruiz, confirma estas previsiones y reconoce que en
esta ocasión no han tenido que esperar a que terminara San Fermín para empezar a
trabajar. Pero Ruiz también expresa alguna queja. Señala que el turismo activo
depende demasiado del tiempo y apuesta por realizar campañas informativas. Ya se
lo han pedio al Principado pero no han recibido su apoyo.
Fuente de información:
LaVozdeAsturias