La estación de servicio de la autovía en Colunga estará abierta en abril
Fecha Viernes, 03 marzo a las 10:36:31
Tema Construcción


Las obras de las estaciones de servicios ubicadas en ambos márgenes de la autovía del Cantábrico a su paso por el concejo de Colunga estarán concluidas el próximo mes de abril. La empresa adjudicataria de estos trabajos, Obras, Caminos y Asfaltos S. A., se ocupa ya de la construcción de los carrilles para la entrada y salida de vehículos a las dos semiáreas desde la autovía, tanto para los vehículos que circulan dirección a Santander como para aquellos que se dirigen al centro de la región. Se trata de la única estación se servicio ligada a la autovía que existirá desde la localidad llanisca de Bricia hasta el centro de la región.

En las parcelas, de unos 8.000 metros cuadrados cada una, se alza ya un edificio de planta baja que albergará un restaurante y una tienda, equipamientos anexos a la zona habilitada para el suministro de gasolina, donde se instalarán cuatro surtidores. Responsables de la empresa adjudicataria confirmaron que los trabajos podrían concluir en el mes de abril y explicaron que «apenas faltan pequeños acabados de imagen y la urbanización de las parcelas», que se encuentran situadas en el punto kilométrico 347,500.

La veintena de operarios que trabajan en estas obras -que comenzaron en el mes de febrero de 2005- se afanan ahora en realizar los últimos retoques y en las próximas semanas podrían comenzar a equipar las distintas instalaciones que componen estas dos semiáreas. En cada una de las zonas se habilitará, además, un espacio para el lavado de vehículos y otras dependencias para dar servicio a los camioneros que decidan estacionar en este lugar.

Empleo

Según las previsiones iniciales, entre las dos estaciones de servicio se generarán cerca de una treintena de puestos de trabajo. Los dos restaurantes estarán gestionados por el grupo Paradores y, según comentaron responsables de las obras, su puesta en marcha requerirá la contratación de dieciocho personas.

Cada uno de los dos equipamientos hosteleros tendrá capacidad para unos 80 ó 100 comensales y ambos dispondrán tanto de menú diario como de servicio a la carta.

Las dos tiendas y ambas áreas de suministro de gasolina estarán gestionadas por la empresa Cepsa, que empleará a otras diez personas. Responsables de la empresa adjudicataria de la construcción de esta estación de servicio, Obras Caminos y Asfaltos, explicaron también que los vecinos de la zona tendrán «cierta preferencia» a la hora de acceder a estos puestos de trabajo, aunque, puntualizaron, «no será requisito indispensable» para su contratación.

Cada una de las dos áreas contará con tres plazas para aparcar autobuses, veintiséis reservadas para el estacionamiento de camiones y medio centenar de plazas para turismos.

Pasarela peatonal

El diseño inicial de este área de servicios incluye también la construcción de una pasarela peatonal que comunicará ambas semiáreas, divididas por la autovía del Cantábrico, así como la edificación de un hotel en la margen más cercana a la villa colunguesa, concretamente al Norte de la carretera.

Los responsables de la obra comentaron que la pasarela se construirá en esta misma fase, aunque explicaron que, quizás, las obras se inicien una vez que ya estén inauguradas y en funcionamiento las dos estaciones de servicio y los dos restaurantes. Esta infraestructura se construye con el fin de facilitar el acceso de una área a la otra a los empleados aunque, aclararon, su uso no estará restringido para los clientes.

La ejecución del equipamiento hotelero, según explicaron responsables de las obras, está sujeto a la venta de un determinado número de litros de gasolina y su edificación se realizará en una fase posterior, junto a la adecuación de las zonas de juegos infantiles también previstas en el proyecto inicial.

El estudio de impacto ambiental de esta obra, elaborado por la consultora catalana Ingenios Asesores, estimaba que el impacto sobre el suelo, la fauna o el patrimonio histórico «no representa un riego significativo» para el entorno, aunque reconoce que se deberá realizar «un mayor control sobre el vertido de aguas residuales». Asimismo, el estudio reconoce que la zona donde se ubica la instalación tiene «cierto interés paisajístico por su carácter rural», pero añade que el entorno ya se ha visto afectado por la construcción de la autovía.

Fuente de información: ELComercioDigital







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